¿Quieres saber si comprar coches nuevos sin entrada es rentable y merece la pena? Estás en el sitio correcto. Antes de nada, lo primerísimo de todo es que estudies tu solvencia económica y determines las características que quieres que tenga tu nuevo coche.
Para explicarte qué modalidades de financiación existen para comprar un vehículo sin entrada es preciso que antes conozcas las ventajas y desventajas que tiene dicha compra.
Ventajas de comprar coches nuevos sin entrada
- ¿Alguien ha dicho gran desembolso de dinero? Olvídate de esto si vas a comprar un coche nuevo sin entrada, pues podrás pagarlo cómodamente a plazos sin la necesidad de afrontar un gran primer pago que perjudique la economía de tu bolsillo.
- Además de la entrada, puedes ahorrarte gastos asociados como la matriculación del coche, los impuestos, el seguro, etc.
- No pierdes el tiempo buscando e informándote acerca de las diferentes opciones de préstamo que ofrecen las entidades bancarias. Por tanto, otra cosa más que te ahorras, los trámites.
Desventajas de comprar coches nuevos sin entrada
Como se suele decir, no es oro todo lo que reluce, de manera que comprar un coche nuevo sin entrada también implica algunas cosas en contra que hay que tener en cuenta:
- Las comisiones son más altas, por lo que a largo plazo el coche puede salirte más caro que si hubieses pagado la entrada. Además, no pagar al principio supone alargar el periodo de amortización del pago, que pasa de ser en 5 años a ser en 6 (por ejemplo), lo que supone que asumes comisiones durante 12 meses más.
- La oferta de coches es más reducida. No todos los vehículos pueden comprarse sin entrada, por lo que tendrás que acotar tu búsqueda para dar con aquellos que te permitan esta opción.
¿Cómo financiar coches nuevos sin entrada?
Existen fundamentalmente cuatro formas para financiar un coche sin entrada: los bancos, los concesionarios, leasing y renting. Te explicamos cada una en líneas generales:
– Bancos
Dado que imaginamos que la mayoría conocerá el proceso de pedir un préstamo para poder afrontar un pago, no nos vamos a enrollar mucho.
Es una fórmula que no está, para nada, exenta de trámites, y que requiere invertir mucho tiempo en investigar las condiciones que ofrece cada entidad bancaria para optar por la más conveniente.
– Concesionarios
Las marcas de coches, a través de su red de concesionarios oficial, ofrecen diferentes servicios de financiación. La ventaja de esto es que aquí, a diferencia de en el caso anterior, puede entrar en juego la negociación, lo cual puede verse materializado en un descuento o en extras.
Sin embargo, los intereses que se aplican suelen ser superiores a los del banco, por lo que es conveniente que barajes ambas opciones y analices cuál es más rentable.
– Renting sin entrada
La conocida opción del renting sin entrada consiste en firmar un contrato de alquiler que te permite utilizar un coche durante el tiempo acordado sin que realmente forme parte de tu patrimonio, aunque puede hacerlo al final si decides comprarlo.
Normalmente, el renting incluye un seguro a todo riesgo, los mantenimientos, la asistencia, las reparaciones y las averías, aunque puede darse el caso de que no sea así. Además, tienes la gran ventaja de poder cambiar de coche cada 3-4 años y, cada vez que realices ese cambio, obtener uno totalmente a estrenar.
Por contra, se encuentra la limitación anual en el kilometraje. Si andas de aquí para allá continuamente, probablemente la opción del renting no sea una de las más adecuadas para ti o te dejarás un riñón pagando kilómetros extra.
– Leasing
Es similar al renting, pero en este caso el mantenimiento del coche corre de tu cuenta, incluido el seguro, entre otros. Una vez venza el contrato, podrás tomar la decisión de adquirir el vehículo o devolverlo. Además, las cuotas suelen ser más bajas porque el cuidado del vehículo no está incluido.
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Sabiendo esto, ¿cuál es la mejor opción de financiación? Todo depende de tu situación económica y de tus intereses. Si tienes una economía inestable probablemente te compense más optar por la vía tradicional y hacer varias visitas al banco. Si, por el contrario, tu economía es tan estable que, aunque se tuerza la situación, podrás salir del paso, entonces quizá sea más conveniente que estudies las otras opciones.
Consejos para comprar coches nuevos sin entrada
Aunque ya te hemos dado varios consejos para esto durante el post, no está de más organizarlos y plantearlos de forma ordenada.
- Estudia bien tu situación financiera. ¿Tienes capacidad suficiente para afrontar una deuda durante el plazo establecido? ¿Te puedes permitir optar por la modalidad del renting para despreocuparte del mantenimiento del coche? Hazte preguntas y ve resolviéndolas, esto te ayudará en la toma de la decisión.
- Infórmate en profundidad acerca de las diferentes formas de financiación. Aunque en este post te hemos dado una ligera idea de ellas, es importante que dediques más tiempo a investigar acerca de aspectos como la comisión de apertura, las comisiones por cancelaciones, los intereses, los servicios adicionales incluidos, la documentación necesaria, etc.
- Optes por la opción que optes, lee detenidamente el contrato. Con detenidamente nos referimos a completo y entendiendo absolutamente cada punto, pues llevarse sorpresas después nunca es agradable…
Con toda esta información sobre los coches nuevos sin entrada ya estás preparadx para dar el siguiente paso: buscar un coche que se ajuste a tus necesidades. En esto puede ayudarte nuestro buscador de coches nuevos, en el que encontrarás un amplio repertorio de vehículos en el que puedes filtrar por precio, renting o leasing.